Cuando no la pueden desarrollar, sino todo lo contrario. Es un problema cuando un gatito está creciendo sin referentes, probando y probando, y los humanos no saben responder de manera equilibrada. Las personas que juegan con las manos con los gatos precisamente en este periodo en que el gatito empieza a morder, les generan problemas de agresividad de por vida. Según el gato va creciendo y se va a haciendo más fuerte, sus mordidas son más intensas. Si se ha criado de esta manera, morderá para todo, para relacionarse, cuando se aburre, cuando quiere algo, para todo. Incluso las personas ya no sólo juegan con las manos provocando una mordida más fuerte y que el gato se relacione así, sino que según crece, comienzan a regañarle y a rechazar aquello que ellos mismos le han enseñado, una tremenda incoherencia. Esto causa en el gato una inseguridad terrible a la hora de relacionarse. Suelen ser gatos que acaban teniendo un episodio de AR (Agresividad Redirigida), o agrediendo a las visitas, e incluso teniendo muchas dificultades a la hora de conocer a un gato nuevo.

Durante los primeros meses de vida, necesitan con urgencia relacionarse con otros gatos y jugar cuerpo a cuerpo con ellos. Gracias a esto, crecerán siendo adultos equilibrados, es la única manera. El humano no podrá nunca sustituir el aprendizaje que sólo un referente de su especie le puede proporcionar.

A partir también de esa edad, necesitan investigar, jugar con todo, probar las reacciones de las cosas, perseguir insectos y todo lo que se mueva, desarrollando así también sus habilidades de depredador y cazador. Durante los dos primeros años de vida aproximadamente, los gatos suelen ser bastante activos y necesitan estar estimulados y entretenidos en casa si no salen al exterior. Cuando son muy activos y jóvenes y viven en un entorno pobre en estímulos, padecen problemas de ansiedad y estrés, aburrimiento, lo que les lleva muchas veces a tirar objetos al suelo (para comprobar su reacción, pero son inertes y se aburren enseguida), a maullar sobre todo por las noches, a jugar con las personas que están durmiendo, a morder cables, marcar en exceso (los gatos no rompen cosas, sólo cuando tienen estrés) e incluso pueden desarrollar un problema de Pica, eliminación con orina o de acoso a otros gatos.

Como siempre decimos en Terapia Felina, “los gatos siempre tienen razón”. Por eso, si un gato necesita estar entretenido debemos ayudarle a que lo esté, en vez de regañarle para que no nos moleste y se esté quieto. Si adoptas un gato pequeño, joven o activo, estas fases las vas a vivir y tienes que ayudarle a desarrollarse de manera equilibrada, sin enfados ni límites impuestos.

En vez de jugar con las manos y estresarlo, proporciónale diferentes tipos de juegos con los que entretenerse y estar estimulado, así como acceso a lugares seguros desde los que pueda ver el exterior y algo natural y vivo (una ventana o balcón protegido), intenta cambiarle los juegos y los juguetes, estimula todos sus sentidos de cazador según le vayas conociendo. Irás viendo qué cosas le atraen más que otras y podrás ir ayudándole a ser feliz así.

Es normal que aún teniendo juguetes en casa muerdan a las personas de manera preferente. Esto es porque somos lo único que está vivo en casa, todo lo demás es inerte, no tiene temperatura, ni latido de corazón, ni olor ni movimiento. Un cazador como el gato se siente atraído por el olor de su presa, su latido, su movimiento, su olor. Si te viene a morder las manos o los pies, quédate muy quiet@, y hazle sentir que te hace daño, con un “Ay!” pero que también transmita la emoción. Nunca un “no!”, ni ponerle el dedo por delante de la cara, nunca un spray de agua, nunca un enfado ni autoridad. Queremos que aprenda que hace daño, exclusivamente eso, no que está “mal”, ya que eso no existe en el reino animal. Ya verás cómo lo entiende enseguida y deja de morderte, mientras le ayudas a estar entretenido en casa. Pero no olvides que todos los gatitos necesitan criarse con su especie y que por muy bien que lo hagas, crecerá con esta carencia, por eso, si no deja de morderte, es porque necesita jugar con otro gato cuerpo a cuerpo. Seamos responsables y consecuentes y ayudémosles a crecer siendo gatos equilibrados para siempre, con todas sus necesidades cubiertas, así serán felices y tendrán incluso mejor salud al tener mayor capacidad para gestionar el estrés y que no les afecte.