31 Dic Por qué no jugar con las manos con los gatos
Por qué no jugar con las manos con los gatos
prevenir la agresividad
Autora: Laura Trillo Carmona.
¿De verdad aún crees que jugar con las manos con tu gato no le causa ningún problema?
Muchas personas suelen divertirse realizando juegos brutos con el gato. Juegan con sus manos, provocando al gato y haciéndolo rabiar, sobre todo si el gato es pequeño.
Por más que en Terapia Felina decimos que es contraproducente jugar con nuestras manos con el gato, muchas personas siguen haciéndolo, y esto genera problemas más adelante en el gato cuando es adulto. Es más importante de lo que parece. Llevamos más de 22 años trabajando gatos con todo tipo de agresividad y todos tienen un perfil parecido: gato criado con personas, sin otros gatos, que han jugado con las manos con ellos. Es alarmante para nosotras porque la estadística es de un 100%. Así que por favor, lee este artículo, edúcate a ti mism@ y actuemos para prevenir tanto abandono y sacrificio de gatos por problemas de agresividad.
No existen los gatos agresivos, la comunicación agresiva hacia personas no es natural en ellos, sino que es aprendida con los humanos.
Cuando el gato pasa del mes a los dos meses de edad, pasa por una fase de aprendizaje muy importante: el autocontrol y la intensidad de la mordida. Esto lo suelen aprender mediante juegos con sus hermanos y su madre, por eso es ideal que el gatito viva con su familia mínimo hasta los 3-4 meses de edad o con otros gatos con los que pueda jugar cuerpo a cuerpo y que le enseñen. Si el gatito no pasa esa edad con su familia gatuna, y en cambio lo pasa con nosotr@s, debemos tener cuidado y procurar enseñárselo nosotr@s, pero crecerá con carencias en su aprendizaje y socialización. A estas alturas con tanto abandono de gatos por problemas que ya hemos comprobado de sobra de dónde nacen, tenemos que ponernos las pilas y ser más responsables.
Estamos haciendo justo lo contrario. En esta fase, al jugar con el gato con las manos, le estamos estresando para que reaccione, le estamos frustrando porque no paramos, le estamos haciendo sentir una sobreexcitación muy intensa que no sabe gestionar porque no es natural en él. Se le provoca con nuestras manos y se le hace rabiar para que muerda más fuerte, que es justo lo contrario a lo que debe aprender, los limites naturales y a relacionarse de manera equilibrada, a gestionar sus emociones con fluidez, como sólo otro gato es capaz de enseñarle. También se suele jugar a provocarle con los pies. En la mayoría de las ocasiones para el gato esto no es un juego, le hacemos rabiar y enfadamos así que opta por defenderse. No es nada divertido. Luego será un adulto, un gato enorme, mordiendo con muchísima más intensidad para relacionarse, y será un candidato a tener un episodio de AR (Agresividad Redirigida).
Desgraciadamente no nos estamos inventando nada, esta es nuestra experiencia como terapeutas profesionales, lo vemos cada día, trabajamos con gatos con agresividad y AR (Agresividad Redirigida) todos los días desde hace muchos años, y todos ellos tienen este perfil.
A lo mejor has tenido gatitos muy equilibrados que han mordido flojito y por más que les provoques no les causas ningún problema. A estos gatos nosotras los llamamos “gaticornios”, porque son raros, son el equilibrio que ningún humano puede corromper. Pero la realidad de las que trabajamos con miles de gatos y con protectoras, donde estos gatos acaban si no acaban sacrificados, es otra.
De hecho, tenemos el programa Gatos Guerreros, que son gatos que han crecido con personas, que han jugado con las manos con ellos, que les han regañado después por morder, y les han generado un grave problema. Nuestros guerreros han tenido una vida muy difícil con personas, han acabado teniendo fuertes episodios de AR con estas personas, que luego los han abandonado. Nuestro equipo rehabilita estos gatos y les encuentra un nuevo hogar donde se les trate mejor, y ninguno vuelve a recaer en la AR.
¿Qué ocurre cuando el gato es adulto?
Que no tiene autocontrol ninguno ni sabe gestionar el estrés, tampoco sabe relacionarse con otros gatos. Suelen convertirse en gatos que muerden muy fuerte, que se abalanzan sobre nosotros de buenas a primeras y nos muerden (se lo has enseñado tú), que se comunican de forma agresiva con nosotros para cualquier cosa, que no tienen medida a la hora de morder ni controlan cuando es juego, se frustran. Muchas personas nos contactan diciéndonos que tienen un gato agresivo, que apenas se deja tocar porque muerde, que les “ataca” mientras caminan por los pasillos de casa, que están sentadas tranquilamente y viene el gato y les muerde, y con dos preguntas ya llegamos al origen del problema, y es éste. Todos estos comportamientos suelen estar derivados por un gran error nuestro a la hora de relacionarnos con ellos, o porque le ha faltado este aprendizaje en la edad adecuada junto a otro gato. Pero nunca es tarde, se puede trabajar a cualquier edad, si la familia se implica y cambia.
Estos vídeos son muy importantes si queremos de verdad concienciarnos sobre esto:
¿Cómo ayudar a mi gatito a crecer equilibrado?
Te recomendamos que te informes bien sobre sus etapas de aprendizaje y necesidades, como contamos en el vídeo. En la fase en que el gatito comienza a morder y a relacionarse, necesita urgentemente otro gato. Cuando nos muerda a nosotr@s, tenemos que dejar nuestro cuerpo muy quieto y hacer un grito de dolor, transmitir dolor, la emoción. Y luego nos vamos. Así de simple. Sin enfadarse, de manera natural. El gatito aprende muy rápido y lo asimilará, comenzará a morder más flojito. No sirve de nada que cuando muerda le des un juguete, no está aprendiendo nada. Haz esto tan sencillo, y si tienes dudas puedes contactar con nosotras siempre.
Muchas personas nos dicen que no pueden tener otro gato. Otras personas más extremas nos dicen que entonces es mejor que el gatito esté en la calle si no pueden adoptar dos. No son más que excusas. Sabiendo lo que sabemos, es de sentido común y se pueden buscar siempre soluciones para el bienestar de estos gatitos. Si encuentras un gatito sin madre ni hermanos, intenta que se críe con otros gatos. Si quieres tener un gato pero no puedes tener dos, adopta un gato ya equilibrado, aprendido o adopta un adulto. Busca soluciones, con esta información, para que tu gatito no tenga problemas en el futuro, es tu responsabilidad.
Sabemos que las asociaciones, protectoras de animales y perreras siempre están desbordadas pero no por ello debemos ignorar esto y perjudicar a los gatos. La persona que adopta es responsable también, por tanto la persona que adopta no debe jamás exigir adoptar un sólo gato, recién nacido o lo más pequeño posible. La persona que adopta debe ser consciente y adoptar dos gatitos para que aprendan juntos, si lo que quiere es gatitos pequeños. Las protectoras de animales temen perder adoptantes si exigen esta medida, por tanto, la persona que adopta, debe ser la que se responsabilice también de ello. Esto es un trabajo en equipo, evitar que los gatos crezcan con problemas, nos concierne a tod@s.
A los gatos no hay que educarlos, no somos líderes de manada ni superiores, la autoridad y la imposición deben estar exentas en una relación.
¿Qué no hacer?
Aparte de no jugar con las manos y no provocar, también es muy contraproducente regañar, mover la mano delante del gato, decirle “NO”, soplarle a la cara, pegarle, levantarle el dedo, echarle agua, invadirle, tocarle cuando no quiere, y cualquier cosa que provoque un efecto negativo, que sea desde la autoridad y el enfado. No queremos un gato frustrado que nos tema, queremos un gato feliz y equilibrado. La autoridad debe estar exenta en la relación. No somos jefes, ni líderes de manada, somos una familia donde nos respetamos un@s a otr@s.
Vídeos
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Resumen
de lo más importante
En resumen, jugar con las manos con los gatos sólo les causa problemas a ellos, por tanto lo que recomendamos es:
- Conocer bien las etapas de aprendizaje de los gatitos y sus necesidades para evitar cometer errores.
- Nunca estresarlos de tal manera que se tengan que defender.
- No tener una relación con ellos desde la autoridad y el castigo, tampoco desde el abuso.
- Procurar que los gatitos se críen con otros gatos que jueguen y se relacionen con ellos.
- Crear un buen ambiente donde los gatos puedan jugar y cazar, trabajar en la estimulación y enriquecimiento.
- Si necesitas ayuda o tienes dudas, puedes contactar con nuestro equipo o ver nuestros artículos y vídeos.
- Si quieres conocer en profundidad a los gatos para ayudarles y entenderles mejor, te recomendamos que te apuntes a nuestro curso de Comunicación Felina, ¡es maravilloso!